domingo, 31 de mayo de 2009

¡Cómo No Te Voy A Querer!

La afición por un club deportivo es un rasgo típico de civilizaciones bárbaras. La afición por un equipo no admite racionalidad alguna, y va en contra de cualquier norma democrática y de tolerancia. Francamente, encuentro la afición deportiva como algo deleznable y troglodita.

¿Pero cómo no los voy a querer? Si mi corazón azul es y mi piel dorada.




















Que quieren que les diga: la liga de futbol mexicana es una liga mediocre que refleja los peores rasgos de un México que no acaba de ser moderno y sigue atávico en un pasado caciquil y mafioso. El futbol mexicano, de segunda, aburrido la mayoría de las veces, inflado por la estupidez y el lucro de las televisoras, depositario de los sueños de superación de masas de pobres e indescifrable pasión de vastas comunidades.

Pero que quieren: los pumas ganaron, y la final casi hasta estuvo emocionante.

No voy a ir al Angel, porque ya es muy tarde y los niños están dormidos, pero con qué gusto estaría allí ahorita, estúpidamente gritando, como un bárbaro irracional y tarado: ¡Como no te voy a querer!

2 comentarios:

Mujer Maravilla a la Mexicana dijo...

Expresas muy bien lo que hace poco me di cuenta, cuando por primera vez le puse atención al futbol europeo con el campeonato de la UEFA. El futbol europeo me brindo una emoción de lo que puede ser el futbol, los pases tan precisos, la velocidad de sus jugadores, la sensación que cada tiro de esquina puede ser un gol, que cada cobro de una falta cerca del área chica realmente tiene posibilidades de entrar a la portería. Antes por mi papá me gustaba mucho el fut, como él estudió en CU los pumas han sido me equipo, me alegra el saber que son campeones, me parece algo extraño y como que cuaja perfecto que el TUCA los haya hecho campeones. Pero como tú comentas la final del futbol casi me pareció emocionante, teniendo todavía las imágenes de los partidos y a veces minutos que vi de los partidos de equipos europeos, se me figura un poco gris, el futbol mexicano, mucho balonazo pocas jugadas espectaculares.

SALUDOS.

Gerardo Escaroz dijo...

Hola,

Cierto, la afición a un equipo no admite racionalidad. Muchas veces el irle a un club va en contra de toda explicación lógica y se acerca más hacia el lado pasional. Sin embargo, eso es lo bonito del futbol: no necesita de una razón verdadera e inequívoca como todas las demás cosas que hacemos durante el día. Eres águila o chiva porque te gusta y punto. Si esa pequeña área dentro del universo de la vida de una persona lo convierte en bárbaro, entonces existen civilizaciones bárbaras en todo el planeta porque en cualquier lugar hay afición por un club de futbol. Pienso que tener un equipo favorito puede ayudar en la formación de una identidad como persona (sobre todo en la juventud), fomenta el compañerismo, crea un sentimiento de pertenencia a un grupo y también fomenta el espíritu de competencia. Por todo esto, aunque estoy totalmente de acuerdo con tu rápida descripción de la Liga de Futbol Mexicano, también pienso que con todos sus grandes errores es mejor que nada en absoluto, y por tanto me alegra que la tengamos.

Y en cuanto al futbol de la UEFA, si el comentario del lector se remite únicamente a la diferencia en intensidad y sobre todo calidad con respecto a nuestro futbol, tienes toda la razón y eso se refleja en mayores emociones en Europa. Sin embargo, creo que en el fondo el sentimiento es el mismo, la pasión es igual, el gusto es equiparable y me parece que a eso se refería el post. Eso sí, la barbarie sí nos rebasa en algunos lugares como Inglaterra o Italia.

Si están interesados en entender un poco mejor la (¿inexplicable?) pasión de mucha gente por el futbol, recomiendo el libro de Juan Villoro, Dios es redondo.

Saludos